domingo, 8 de noviembre de 2015

VIAJES Y COMPAÑIAS



“La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse”.

Ernesto Sábato


Siempre pensé en historias reales, esa ilusión fue siempre mi compañera de viaje, al mismo tiempo que iba escogiendo mi vida, simplemente quería existir de verdad.

Era joven, contaba noches y esperaba madrugadas y muchas más cosas cotidianas. Empecé a escribir una novela romántica con tus datos. Me dijiste tu nombre y una tarde imprevisible, rompiste ciertos esquemas, conseguiste que reconsiderase los espacios oscuros, consagré una concepción del amor sin forma.

Con el tiempo te perdí, sin lamentos y esperando siempre ese “eres mi vida entera” que jamás llegó. Lo asumí desde mis versos a destiempo y en el vacío de lo absurdo ¡Yo! Que quise envolverte en historias casi sobrenaturales.

Ahora otra vez la hoja en blanco me llama, aunque las horas tienen en este momento un color diferente y su olor me permite traspasar límites que existían únicamente en ciertos aspectos de papeles con hojas mojadas Custodiadas simplemente por cajas de cartón y fusiles.

Pedro L. Villalonga y Cardona

No hay comentarios:

Publicar un comentario