…Y así, sin apenas darme cuenta, con todo el esplendor de
mis carencias vitales como compañeras de viaje, algo que se presumía como
desarrollo, creación o incluso me atrevería a decir que evolución conceptual,
inspiración de la destreza… ¡arte en realidad! Perturbó mis esbozos, planeó
sobre mis bocetos, hizo renacer
entusiasmos de un instante, principios en apariencia complejos y sin embargo
factibles… al momento nacieron asimetrías que afligieron mi efímera condición,
pesadumbres que alteraron todo mi ser… afloró mi minúscula condición y aun así,
mi propia naturaleza trató de encontrar una luz y creedme no fue nada fácil y
es que en ocasiones se hace necesario un sustento para ello ¿el mío? recordé
que una gota de agua es un tsunami para una hormiga… ¡es la vida!
Pedro L. Villalonga y Cardona
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